Inteligencia Sexual y Coeficiente Erótico

La Inteligencia Sexual, pasa a ser el Decimo tipo de Inteligencia, pese a que popularmente vemos el sexo como algo más bien ligado a los instintos que a la inteligencia. Sin embargo este concepto ha cambiado, pues se ha llegado a la conclusión que “el principal órgano sexual es el cerebro”, tal como lo recalcan desde la Asociación Española de Psicología Clínica Conductivo Conductual (AEPCCC).

¿Qué es la Inteligencia? En si misma el diccionario la define como la capacidad de entender o comprender…

El concepto de Inteligencia aplicado a la sexualidad, nos dice que la Inteligencia Sexual no es un talento innato, sino más bien, una habilidad que se aprende, por tanto, tener una vida sexual satisfactoria no es cuestión de suerte, de belleza o sex-appeal, sino más bien de habilidades que se pueden adquirir, desarrollar y por supuesto, dominar.

Algunos especialistas sostienen que el sexo representa al menos un 50% de la estabilidad emocional de una pareja, el resto está compuesto por la afinidad,  confianza, entre otros factores… Siendo estos los números, resulta extraño que en una sociedad libre de tabúes, seguimos negados a hablar libremente con nuestra pareja acerca de nuestros deseos y necesidades en el ámbito sexual y superar así las inhibiciones que desmejoran nuestra vida erótica.

Los tabúes que mantenemos hacen que alrededor del mundo, exista un alto porcentaje de personas padecen algún grado de insatisfacción sexual, pero no lo admiten y al no reconocerlo se quedan estancados. Pero que distinto es cuando una persona se escucha a sí misma, conoce sus puntos de placer y más importante aún, sabe cómo transmitir estos conocimientos a su pareja, para entonces disfrutar plenamente de su vida sexual, esta sería la actitud de una  persona inteligente, sexualmente hablando.

Ahora bien el Coeficiente Erótico de una persona no se define tan solo por el coito en sí mismo, sino también por besos, caricias, juegos, fantasías y todo aquello que conlleve a la estimulación de los sentidos, siendo todas estas herramientas la mejor manera de demostrar inteligencia sexual.

Resumiendo un poco, Los científicos plantean que hay tres (3) indicadores que comparten las personas con “Inteligencia Sexual”, los cuales puntualizamos a continuación:

1. Cuestiones Básicas, tanto teóricas como prácticas en materia sexual, como por ejemplo Colocar un preservativo, conciencia sobre el sexo responsable, síntomas de infecciones de transmisión sexual, enfermedades asintomáticas, especialistas que atienden los diversos aspectos de nuestra vida sexual.
2. Autoconocimiento: Una persona inteligente en materia sexual conoce bien su cuerpo, deseos y sensaciones y así mismo reconoce tanto lo que le gusta como lo que no, producto de ello saben de qué manera marcar límites y notan cualquier cambio en su cuerpo y su sexualidad.
3. Comunicación: Una persona que sabe comunicar sus necesidades a la pareja, pedirle abiertamente lo que desea y al mismo tiempo es capaz de ponerse en la posición de su contraparte para reconocer lo que esta puede estar sintiendo. Es una persona con Inteligencia sexual. Sencillamente hablan de sexo con su pareja y superar las inhibiciones que desmejoran su vida erótica, todo ello gracias a su empatía y honestidad en los vínculos emocionales en los que se involucran.

Cabe destacar que el disfrute en general, no solo se trata de lo que hacemos o como lo hacemos, sino también de la actitud que tomamos, y la conciencia que desarrollemos respecto a la sexualidad como algo propio e individual. Por ello los especialistas hacen tanto hincapié en que debemos conocernos muy bien y responsabilizarnos de nuestra felicidad, para entonces poder encontrarnos con nuestra pareja de una mejor manera.

Como consejo final; Vea el sexo como un ciclo, entre más placer le proporciones a tu pareja más placer te producirás a ti mism@, entre menos egoísta seas mejor para todos, recuerde que el sexo es un proceso del que ambos deben disfrutar, de aquí en adelante atrévase a explorar nuevas cosas, comuníquese abiertamente con su pareja, excítela y complázcala, en pro de una sana sexualidad. En fin a base de conocimientos y practica Incremente su inteligencia sexual y conviértase en ¡el mejor amante!